3.11.07

Solución de continuidad.

Adiós vieja, El espectáculo debe continuar. Las dos últimas entradas hablan por sí mismas. Hablan entrecortadas, repletas de emoción, pero no lo dicen todo. He sido terriblemente irresponsable con ustedes. Puede que injusto.

A las 00:05 de la madrugada del treintayuno de octubre perdíamos a Angelina, mi madre. Tenía el amor mucho más grande que el corazón. Así, se le reventó la vida, se le cercenó la aorta y se le fue el aliento. Toda su energía parecía desvanecerse; irradiar hacia un universo lejano, frío y agradecido.

Días antes, el veinte de octubre a las 14:06 se produjo el único acontecimiento capaz de rivalizar en importancia con esta dolorosa muerte: nacía Sigfrid, mi tercer hijo. Ser testigo del parto, de su repugnante belleza, me convirtió en un semidiós inexpugnable. Cuando su cabecita empapada emergió por la boca sagrada de la hembra, me fue dado contemplar el traspaso de poder: todos los misterios de la vida, los que el cosmos guarda para los elegidos que saben sonreír a diario, que hacen del silencio una de sus mejores armas y de la negociación discreta su herramienta, por una sinapsis extraña, comenzaron a fluir desde ella hasta él.

Algún demiurgo amable decidía no condenarnos a una soledad definitiva.

15 Experimentos:

guaita dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
guaita dijo...

Vols dir que n’hi hagut mai cap de demiürg amable?. Jo no em crec que mai hagis fet res que hagi merescut aquest judici, però, de totes maneres, desitjo que aquesta condemna sigui el més breu possible. I si necessites una llima que t’ajudi a alliberar-te abans, jo te’n puc proporcionar alguna. T’aviso perquè vigilis quan mosseguis l’entrepà ...

UnaExcusa dijo...

Felicidades. Y lo siento.
Un abrazo grande, por los dos.

Madame Vaudeville (Chus Álvarez) dijo...

No tenía por qué explicar nada, Joan. Pero gracias por compartir con nosotros la belleza del nacimiento y la tristeza de la pérdida. Mis padres murieron hace algún tiempo y entiendo cómo puede sentirse ahora. De hecho la última entrada de mi cabaret habla de eso, de ausencias...
Felicidades por ese niño y un beso, esté donde esté, para su abuela. Un abrazo cálido.

Ginebra dijo...

Enhorabuena!

Tristancio dijo...

"La vida y la muerte
bordada en la boca..."

(El la tuya)

Abrazo.-

LiLuh dijo...

Sí, felicidades y lo siento mucho.

Anónimo dijo...

Un beso, Joan, de corazón.

Mamen.

ybris dijo...

Brindemos por ese demiurgo amable.
No sabes cómo me alegra que la vida se renueve.
Y, aunque ya hayan pasado unos días, vaya aquí mi felicitación por Sigfrid.
Ninguna soledad podrá ser así definitiva.

Un fuerte abrazo

Anónimo dijo...

Te felicité por Sigfrid y ahora te mando un beso muy fuerte para ayudarte con lo de Angelina. Yaiza

Ana dijo...

Pues... dos abrazos.

Uno de consuelo, y otro de alegría compartida.

Tiempos feroces en los que se entremezclan los sentimientos.

Un beso grande, y no olvide acercar la nariz a Sigfrid tantas veces como pueda a lo largo del día.

Alice ya no vive aquí dijo...

No dejará de estremecerme el poder de la vida y la muerte. Cómo la hermosura de la primera termina con la segunda. Supongo que lo verdaderamente bello es lo que somos capaces de construir entre principio y final.

Siento lo de tu madre, y te envío un sincero abrazo en la distancia.

sergisonic dijo...

encontrar la amabilidad en los relojes de la vida no es poco, al contrario. un abrazo especialmente sónico, ya de viaje por noviembre.

Una hija de puta con clase dijo...

Ser huérfana me adelantó el sufrimiento de perder a los padres. Estar sola me priva de ser madre (de momento). En cualquier caso todo está controlado y la ley de la compensación existe.
Un beso

3'14 dijo...

Uff... La absurdidad de la existencia... Lo único seguro que tenemos todos por lo cual atravesamos en un momento a lo largo del camino y que no nos diferencia los unos de los otros es nacer y morir.
Nacer puede ser un regalo en algunos casos y una condena en otros. Morir un descanso para quien parte y una tristeza para los que se quedan y sufren la pérdida de quien les deja.
Así, lo único que nos queda es vivir cuanto se nos permita intentando dar para recibir y recibir para repartir. Mientras sigamos acordándonos de quienes perecieron jamás dejarán de existir.

Felicidades por el nacimiento de tu hijo.

un beso.

Publicar un comentario

Powered By Blogger